Long, long time ago…
https://menudapeli.es/wp-content/themes/osmosis/images/empty/thumbnail.jpg 150 150 Asisnauta Asisnauta https://secure.gravatar.com/avatar/f5b7c92c0d8af797ed9ce743f5856926?s=96&d=mm&r=gHace 12 años se me ocurrio hacer una peli con mi hijo…
La prehistoria de MenudaPeli
Hace 12 años se me ocurrió hacer una peli con mi hijo…
Casi ni recordaba este post, el primero de muchos, donde contaba como se me ocurrió la idea de enseñar lenguaje audiovisual a niños. Es la Prehistoria de MenudaPeli
Durante la famosa epidemia de gripe A, mi hijo de siete años se contagió, obligándole -y, por extensión, a mí- a pasar una cuarentena de una semana encerrado en casa. Tras repasar exhaustivamente la colección de DVDs, cuentos, juegos.… se me ocurrió una idea:
-¡Nico, hagamos una película!
Así nació “El ataque de la comida mala”, nuestra primera película. Y, aparte de lograr el principal objetivo (combatir el aburrimiento), me di cuenta de que Nico, de pronto, había descubierto un montón de cosas nuevas para él: para qué sirven el escáner, la cámara del móvil o Google, qué es un archivo informático, el explorador de Windows…
Hoy en día, los niños viven sumergidos en un mundo audiovisual y tecnológico sin precedentes. Son los destinatarios finales de productos multimedia y electrónicos de última tecnología: el más moderno móvil con toda clase de aplicaciones, videojuegos cada vez más complejos y, sobre todo, internet. Pero demasiado a menudo se limitan a ser usuarios pasivos de un universo que les ofrece grandes posibilidades creativas y lúdicas. ¿Por qué no enseñarles una nueva forma de relacionarse con la tecnología?
El cine es un excelente vehículo para desarrollar su creatividad y para lograr que se familiaricen con esa tecnología a muy temprana edad. Fomenta el trabajo en equipo, las habilidades de comunicación, la imaginación, la planificación… y ofrece un resultado final tan atractivo para niños y adultos como es una película.
Por otro lado, el conocimiento de los códigos audiovisuales nos permite formar espectadores más críticos y exigentes, así como dotarles de las herramientas y conocimientos necesarios para que se desenvuelvan en un medio en el que están sumergidos desde muy pequeños.
Partiendo de los valores que aporta la metodología de trabajo del cine,
Desarrollaremos habilidades básicas que favorezcan la convivencia, la comunicación, el respeto por el trabajo de los demás y la confianza mutua, así como el sentido de la responsabilidad y el cuidado del trabajo propio. En este punto pondremos especial hincapié en promover valores de igualdad, respeto, ecología y no violencia.
Por último, destacaría el poder motivador e ilusionante que sobre los más pequeños ejerce el cine, un medio que, ahora más que nunca, está al alcance de todos.